Retos que enfrenta la industria de mariscos y pesca artesanal en Colombia
La pesca del camarón en Colombia se da de manera artesanal y ésta responde a tradiciones de generaciones en el Océano Pacífico y a una falencia en la cadena productiva del país.
El municipio de Tumaco produce más de 860 toneladas de camarón al año, lo que representa 11% de la producción nacional. Con una pesca completamente artesanal y a pesar de los altos costos de la materia prima y la competencia de grandes embarcaciones industriales extranjeras que obtienen permisos para faenar a gran escala en las aguas del Pacífico colombiano, el municipio ha encontrado en este crustáceo una fuente de empleo para más de 500 pescadores de la región, con la que sostienen sus hogares día a día.
A nivel global, éste es uno de los productos más populares y variados en su preparación y consumo. Se conocen cerca de 240 especies y son llamados en otras latitudes del Pacífico americano como quisquillas o esquilas.
En esa región, el camarón representa 90% del impulso de su economía pues la cadena de valor del camarón tiene la capacidad de emplear mucha mano de obra, especialmente femenina, ya que el proceso es realizado por madres cabezas de familia y víctimas del desplazamiento forzado.
“Entendimos que el principal problema de las comunidades es tener acceso al mercado y al capital de trabajo que les garantice un empleo, por lo que hemos entablado alianzas con productores locales donde les garantizamos la compra de sus productos bajo presupuestos de producción, dándoles además anticipos que les permitan trabajar sus cultivos y procesos, desde la siembra hasta la cosecha. En cada origen contamos con un líder que se encarga de ejecutar y administrar estos desembolsos con sus comunidades”, explicó Juan Sebastián Jaramillo, director general de Sangara.
A pesar de que este marisco se ha convertido en la fuente de empleo para muchas regiones del país, y en especial del Tumaco, a Colombia le falta avanzar en cuanto a sus cultivos y a la cadena de producción.
Según estimaciones de la Aunap (Autoridad Nacional de Pesca), en países donde se produce toda la cadena de valor de camarón de cultivo, cada tonelada que se comercializa tiene el potencial de generar un empleo continuo al año.
Sin embargo, los esfuerzos que realizan muchas empresas, pescadores y acuicultores, y a pesar de que en Colombia el consumo per cápita de camarón está por encima de los 100 gramos al año, más de 95% de esta oferta proviene de otros países, principalmente de Ecuador.
Una apuesta por la Acuicultura
Colombia, ha venido aumentado su consumo de pescados y mariscos, sin embargo, este aumento se ha dado principalmente a productos importados, como la basa, la tilapia, el salmón y el camarón. Por esta razón, y teniendo en cuenta las ventajas geográficas del país, empresas productoras ven como reto aprovechar la oportunidad para desarrollar una industria que ya cuenta con una demanda local capaz de apalancar su desarrollo.
Tomado de: Agronegocios
Editado por: Croper