La aparición de parásitos en las distintas regiones del país no se presenta por sí sola, trae consigo una serie de factores que, muchas veces, son desapercibidos  por los productores.

Nelson Moreno, médico veterinario zootecnista y actual coordinador técnico de ganadería en MSD Colombia explica que los cambios climáticos en Colombia provocan que durante todo el año haya parásitos. Sin embargo existe una marcada influencia por parte del clima a que se presenten parásitos y estrés calórico en los animales.

“Hay que saber de qué depende que haya más o menos parásitos en mi finca o en mi región. La respuesta de esto es que dependen del clima y el medio ambiente en el que se encuentra el predio”, menciona Moreno.

En Colombia se pueden encontrar cuatro tipos de climas: el seco, seco – húmedo, húmedo y húmedo – seco. Estos parecieran ser iguales, pero la realidad es que las diferencias entre los factores que inciden en la presencia de parásitos son amplias.

En el caso del clima seco, cuando hay poco calor y muy buena nutrición, hay poco parasitismo. Esto se presenta porque hay poca humedad y el animal tiene cómo defenderse inmunológicamente.

Para el clima seco – húmedo, es evidente que hay una buena cantidad de calor, pero hay humedad y muy buena nutrición para los ganados bovinos. Por lo tanto, se dispara el parasitismo en este tipo de regiones.

De acuerdo con Moreno, en el clima húmedo “hay una altísima temperatura, baja nutrición y con esto, lo que pasa es que hay un parasitismo elevado. Para el clima húmedo – seco, la temperatura es media, se baja la nutrición y se eleva totalmente el parasitismo”.

El médico veterinario asegura que todo va ligado entre sí, pues la humedad, temperatura y nutrición dan como resultados altos niveles de parasitismo.

“Cuando se reúnen estos puntos, hay más probabilidad que haya presencia de parásitos en mi finca y es ahí donde tengo que contar con las herramientas y los programas necesarios para controlar ese parasitismo, de tal manera que no afecte la productividad de los animales ni la rentabilidad del negocio”, explica Moreno.

El experto reiteró que es imposible controlar los cambios de temperatura en el campo, pero que en las manos de los productores está el hacer un control de los parásitos de tal forma que no generen dificultades económicas y sanitarias en la explotación ganadera.

Colombia es un país que por sí solo, se ve muy influenciado por el cambio climático y las prolongadas temporadas, por lo tanto, cuando en las fincas haya presencia de parásitos, lo ideal es consultar con un profesional que sepa cómo abordar el tema y cuáles son las recomendaciones que se debe seguir para frenar el contagio en los demás bovinos.

Fuente: contexto ganadero
Editado por: Croper