El agua es un recurso vital para el crecimiento y desarrollo de todo ser vivo, y en la actividad ganadera representa un elemento crucial para la producción cárnica y láctea. Expertos aseguran que antes de iniciar una explotación ganadera, es fundamental evaluar detenidamente las fuentes cercanas de agua y las formas de conservación de la misma, ya que el agua es esencial para asegurar un nivel óptimo de producción.

Calidad y temperatura del agua

La calidad del agua es determinante para la salud y nutrición de los animales. Esta debe tener la menor cantidad posible de materia orgánica, partículas de suspensión, arenas y tierras, que pueden afectar la nutrición animal. Además, la temperatura del agua juega un papel importante, ya que variaciones extremas pueden afectar el metabolismo de los animales.

Necesidades de agua en la ganadería

Una finca ganadera debe poseer agua suficiente para satisfacer las necesidades de todos los animales. Durante los meses calurosos, las necesidades de agua de los animales pueden aumentar hasta un 60%. La restricción de agua puede producir efectos indeseables en los animales, por lo que es fundamental garantizar un suministro adecuado en todo momento.

Uso eficiente de los recursos hídricos

Hacer un uso eficiente de los recursos hídricos no solo contribuye a la salud y bienestar de los animales, sino que también ayuda a estar preparado para épocas de sequía, que pueden representar grandes pérdidas económicas. Construir drenajes, reservorios y mantener sistemas de rotación son algunas de las medidas que se pueden tomar para garantizar el suministro de agua durante épocas secas.

Realización del acueducto ganadero

El objetivo principal del acueducto ganadero es consumir la menor cantidad de agua posible en el proceso de producción, protegiendo al mismo tiempo las fuentes de agua y manteniendo la vegetación alrededor de estas fuentes. El acueducto ganadero, en esencia, es la infraestructura necesaria para llevar el agua desde la fuente hasta los potreros donde se encuentran los animales.

Para lograr esto, se utilizan tuberías o mangueras que distribuyen el agua de manera eficiente en cada uno de los potreros, según la división establecida. Es importante dimensionar adecuadamente los abrevaderos y tanques según el número de animales que van a beber en cada sitio, para facilitar el acceso al agua y evitar pérdidas. Además, se deben mantener en buenas condiciones las tuberías y mangueras para asegurar un flujo constante y limpio de agua.

En conclusión, el agua es un componente fundamental en la ganadería, ya que representa el 50% del peso de un bovino y es el principal constituyente celular. Por lo tanto, la correcta realización del acueducto ganadero es esencial para garantizar el bienestar de los animales y la eficiencia de la producción.

Tomado de: agronegocios.co

Editado por: Croper