“En Colombia sabemos hacer ganadería sostenible y sistemas silvopastoriles intensivos, esquema con el cual nos hemos convertido en productores netamente naturales no solo porque se mejora el medio ambiente sino porque contrarresta el cambio climático, de hecho, este solo aspecto es considerado una ventaja comparativa en el acceso a los mercados internacionales”, sostuvo José Félix Lafaurie Rivera, presidente ejecutivo de Fedegán.

Esto se logró gracias al programa Ganadería Colombiana Sostenible que se basa en la implementación de sistemas silvopastoriles intensivos (SSPi) y que el gremio puso en marcha hace una década y media, tiempo en el que ha logrado constatar la favorable y creciente relación entre el suelo, animal y desarrollo ecológico.

Fedegán tuvo la visión que a mediano y largo plazo proporciona la implementación de los SSPi y lo puso en marcha en alianza estratégica con entidades de alto nivel mundial: el Fondo para el Medio Ambiente Global–GEF, el gobierno del Reino Unido, The Nature Conservancy–TNC, Fundación Centro para la Investigación en Sistemas Sostenibles de Producción Agropecuaria–CIPAV, el Fondo para la Acción Ambiental–FA y la supervisión del Banco Mundial (BM). Para la federación, este apoyo, revela la dimensión del programa; las sinergias han venido aportando resultados que lo consolidan.

Su extensión

La GCS se basa en la creación de sistemas silvopastoriles (SSP), es decir, en la integración de árboles como leucaena, botón de oro y otras especies forrajeras con el pastoreo de animales de una manera mutuamente beneficiosa, que impacta positivamente en el medio ambiente.

Ha sido implementada en 160.000 hectáreas de cinco regiones compuestas por 12 departamentos del territorio colombiano: Bajo Magdalena, Valle del Río Cesar, Boyacá, Santander, Ecorregión Cafetera y el Piedemonte del Orinoco.

En las citadas regiones los sistemas silvopastoriles ya hacen parte de 4100 predios bovinos de 87 municipios.

Es de resaltar que en la última década se ha sembrado 3,6 millones de árboles a través precisamente de la implementación de sistemas silvopastoriles en el territorio colombiano”, añadió Lafaurie Rivera.

Las fortalezas

El esquema de los SSPi convirtió a Colombia en un capturador permanente de carbono; “es un sumidero de carbono”, precisa Lafaurie. De hecho, en la última década ostenta la gestión de la captura de 1,5 millones de toneladas y en 10 años, Fedegán y sus aliados estratégicos, proyectan multiplicar la cifra por lo menos en 3,5 veces. Adicionalmente, la construcción de modelos y de estadísticas han permitido establecer un mejor resultado desde varios ángulos.

Mientras la carga animal –medida por la Unidad de Gran Ganado (UGG)– en una ganadería tradicional es de 1,2 UGG por hectárea, en una basada en SSPi este indicador se multiplica por cinco veces ya que registra 5,2 UGG”, afirmó. De igual forma sucede con la producción de leche: se evidenció que esta puede pasar de 794 a 2849 litros por hectárea al año, es decir, permite un incremento del 258,8 por ciento.

También es una opción muy eficiente para incrementar la productividad de comida para el ganado que puede subir de 15.638 a 23.479 kilogramos de forraje verde por hectárea, esto es, un aumento de 7841 kilogramos (50,1 por ciento).

Los SSPi representan una disminución de la temperatura anual entre 2 y 3 grados centígrados, que no sólo se traduce en mejor bienestar animal sino ahorro de agua lo que se traduce en mayor humedad en la tierra. Adicionalmente, contribuyen al bienestar animal ya que los árboles –principal elemento de los SSPi– generan sombra a los bovinos y así logran contrarrestar de manera extraordinaria su estrés calórico traduciéndose esto, en un mayor rendimiento productivo animal.

Sinergias y conocimiento

Un esquema de esta dimensión ha permitido una transmisión permanente de sinergias y de conocimiento que merece transferirse a los productores. Precisamente, basados en este precepto, ha surgido el interés de varios países por conocer el esquema de los silvopastoriles y la ganadería sostenible implementada por Fedegán y sus aliados internacionales. De hecho, se avanzan varias iniciativas con Australia, Nueva Zelanda y países del cono sur en el sentido de transferir el conocimiento y el esquema.

También la academia se ha interesado. En Colombia, se gestó una alianza entre Fedegán y la Universidad del Área Andina de tal manera que pusieron en marcha dos programas: Técnico Profesional en Producción de Ganadería Sostenible que tendrá una duración de 4 semestres y el Tecnólogo en Producción de Ganadería Sostenible de 6 semestres.

“Ofrecemos así una oportunidad a los pequeños ganaderos para que conozcan todos los aspectos y detalles que les permitan lograr hacer ganadería sostenible y que a Colombia le ha permitido convertirse en un país con gran dinamismo exportador”, concluyó el presidente ejecutivo de Fedegán.